No critiques esos zapatos feos,
que luego no sabes si tú los vas a tener puestos.

Quizá con la la excusa de un nuevo día intentas olvidar,
pero tus ojos inchados sólo te hacen recordar.

Perdiéndolo

Que fácil es perder el tiempo,
con un simple vistazo a la ventana,
mi mente vuela,
las aves juegan,
las nubes dibujan historias en el cielo,
comienzo a vagar y vagar,
a pesar de seguir sentada en el mismo lugar...

Que fácil es perder el tiempo,
ahora que lo pienso,
tanto alegar que éste va corriendo, jamás lento,
tanto estrés provocado por este proceso,
mejor cierro la ventana,
miro la pantalla
y me concentro,
quizá así el tan anhelado tiempo
me deja alcanzarlo o si quiera tocarlo,
sería una buena historia...

Y ahí vamos de nuevo,
mirada ida,
cerebro funcionando,
y el tiempo sigue ahí...
avanzando.