Siempre me quejaba de un vacío en mi vida, en mi corazón
Algo faltaba, algo me quitaba la respiración de cuando en cuando,
Creía tenerlo todo...familia, amigos, novio
Creía que era buena, bastaba con ayudar a un par de amigos, o un extraño quizá.
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Intento ya no quejarme, el vacío que sentía ya no lo siento...
"El que busca, encuentra" dicen por ahí,
pero el que busca con humildad, con ojos abiertos caminando en tierra y no sobre el cielo.
Ahora volví ese vacío en un hogar, un hogar para Dios en mi corazón...
Hace no mucho tiempo Lo encontré, Lo encontré de verdad,
Siempre estuvo tan cerca, y yo tan ciega.
Me trajo felicidad, paz y llenó mi vida como nunca nadie lo pudo haber hecho jamás.
¡Y no pienso callarlo!
"Yo soy el camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí." (Juan 14:6).
Y es hasta ahora que entiendo esto y muchas cosas más,
y es hasta ahora que aprendí a ver con otros ojos
y aún sigo aprendiendo.
Dios cambia vidas...Dios es vida misma.
Él está esperando que regresen los que se han ido, y que se acerquen aún más los cercanos,
Él nos llama y hoy te da la oportunidad de atender ese....que no es cualquier llamado.
