lunes, 28 de mayo de 2012

Vacíos en el alma

Personas que se van,
se despiden y se van,
se esfuman del horizonte, 
desaparecen.

Dejan todo desordenado,
adentro...del interior estoy hablando.
Todo se vuelve un desastre,
te dejan en el aire
(o tirado?)

Por fin un día decides limpiarlo,
tomas la valiente decisión de analizar cada pedazo,
de colocarlo todo en su lugar,
de sacudir, guardar y tirar.

Al terminar la tarea te percatas de algo...
el inventario no cuadra,
hace falta algo...

Te quedas ahí parado,
sólo parado viendo a ese enorme vacío,
Te falta el aire y suspiras...

Ahora lo entiendo
esos que se van toman una parte de tí,
y te la quitan sólo porque sí,
por eso duele, 
por eso el vacío,
por eso el extrañar.

Con ellos haces una historia,
nace una parte nueva de tí con cada persona, 
pero si la persona ya no está
esa parte sólo desaparece, se muere.

Quedan rastros es cierto 
y hasta quizá brotaron otras flores
que lo hacen un lugar mejor,
o quien sabe si peor,
pero el vacío siempre queda...
y con el tiempo se vuelve parte de la decoración.



1 comentario:

  1. Con el tiempo también se vuelve parte de lo que quizá de la forma difícil, se ha aprendido.

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